- Porque lo dan todo, sin pedir nada.
- Porque ante el poder del hombre que cuenta con armas...son indefensos.
- Porque son eternos niños, porque no saben de odios...ni guerras.
- Porque no conocen el dinero y se conforman solo con un techo donde guarecerse del frío.
- Porque se dan a entender sin palabras, porque su mirada es pura como su alma.
- Porque no saben de envidia ni rencores, porque el perdón es algo natural en ellos.
- Porque saben amar con lealtad y fidelidad.
- Porque dan vida sin tener que ir a una lujosa clínica.
- Porque no compran amor, simplemente lo esperan y porque son nuestros compañeros, eternos amigos que nunca traicionan.
- Y porque están vivos.
Madre Teresa de Calcuta
Está demostrado científicamente, que los niños que han crecido en compañía de animales tienen menos miedo, desarrollan sentimientos positivos y de empatía con todos los seres vivos. Además favorece:
• La estimulación para el desarrollo psicomotor y del lenguaje, en los niños y adolescentes.
• Mejoras de la comunicación no verbal, altos niveles de autoestima, popularidad y competencia social.
• Positivamente las actitudes de los niños sobre sí mismos y respecto a los demás.
• El desarrollo de diversas áreas incluyendo el amor, los afectos y confort; aprendizaje sensitivo-motor y no verbal, la responsabilidad, el aprendizaje sobre el ciclo de vida; empatía, la conciencia ecológica, y responsabilidades éticas.
Otros estudios documentan que los niños expuestos a animales de compañía durante la primera etapa de la vida, mejora la función inmunitaria:
• Menos alergias y menos sibilancias en el asma en niños expuestos a animales de compañía durante la infancia.
• Protección contra el asma y las alergias en adultos de 28 años expuestos a animales de compañía durante la infancia.
Caretas de animales: